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La psicodelia experimental de Porter; Atemahawke

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El álbum debut de la banda tapatía presentaba una propuesta interesante, donde el rock experimental, el rock psicodélico eran las bases de este emergente proyecto musical.

 

Durante la primer década del 2000 el rock estaba en una nueva etapa musical, ya habíamos pasado aquellos años 90 donde muchas bandas se habían consagrado, ejemplos hay muchos que hoy en día seguimos considerando como bandas de ‘culto’; sin embargo la modernidad alcanzaba también el genero rockero, uso de sintetizadores y otros instrumentos se integraban en proyectos emergentes.

El claro ejemplo es Porter, quienes en su álbum debut ‘Atemahawke’ daban un toque fresco, llamativo, extravagante, psicodélico y experimental. En aquel entonces conformado por Juan Son, Fernando de la Huerta, Víctor Valverde, Diego Rangel, Juan Pablo Vázquez; este trabajo discográfico fue producido por Alejandro Pérez, para la compañía discográfica 3er Piso Records.

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Lanzado el 15 de mayo del 2007, presentando una duración total de 47:27 minutos y desglosado en la cantidad de 11 temas de los cuales resaltan «Host of a Ghost», «Vaquero Galáctico», «Cuervos» y «Xoloitzcuntile chicloso». Durante el avance de los temas se puede apreciar ciertas historias un tanto entrelazadas y extraordinarias en forma de narrativa.

Como ejemplos podemos dejar claro “Host of a Ghost” donde se hace referencia a alguien que amaba, sin embargo con el pasar del tiempo se da cuenta que ha cambiado tanto, así ese sentimiento prácticamente ha muerto, en el vídeo cuenta una historia un tanto confusa, en compañía de gatos y lo que aparenta ser la práctica de un aborto, claro de manera abstracta.

O bien “Vaquero Galáctico”, la historia de un forajido del espacio en la cual el interprete se basó en la perdida de una amiga de él, Juan Son narra de una manera cósmica el tratar de viajar por el espacio para volver a ver a ese ser fallecido.

https://youtu.be/atqbViGxKg0

En la totalidad de los temas se resalta la voz de Juan Son, así como la versatilidad que tiene la banda, en donde hay una diversidad de tema a tema, algunos un tanto más eléctricos otros un poco con más de rock, teniendo una gran aceptación en esa época al grado de ser una de las bandas emergentes más queridas a principios del 2000.

“Atemahawke” es considerado como uno de los mejores álbumes de la década en Iberoamérica, según el portal de club fonograma, donde se pueden apreciar otros grandes álbumes como “Cuatro Caminos” de Café Tacvba, “Bueninvento” de Julieta Venegas, o bien “Residente o Visitante” de Calle 13.

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Singular álbum de lo que aparecería con el tiempo en otros proyectos musicales en aquella época, que incluso hoy en día ha proyectado de manera positiva a la banda jalisciense, a pesar de los cambios en su alineación tras la salida de Juan Son y la llegada de David Velasco, con quien la banda tendría una evolución bastante favorable.

 

 

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